Después de 13 años desde que compartieron pantalla en la película Rock of Ages, Diego Boneta y Tom Cruise volvieron a coincidir, esta vez en el preestreno de Misión Imposible: Sentencia Final.
Aquella conexión que nació durante el rodaje ha resistido el paso del tiempo y se volvió a manifestar esta semana con una conversación llena de admiración, recuerdos y camaradería.
En una reciente entrevista para el pódcast Cracks, conducido por Oso Trava, Boneta compartió detalles personales sobre su experiencia con Cruise, a quien definió como mucho más que una estrella del cine, lo describió como una figura: generosa, cercana y con gran calidad humana.
“La primera vez que Tom me invitó a su penthouse fue para tocar la guitarra. Yo estaba muy nervioso, pero él sólo quería pasar un buen rato, hablar de la vida y compartir su amor por la música”, recordó Boneta.
Más allá del brillo de las cámaras, su relación se forjó a través de momentos sencillos: conversaciones honestas, ensayos casuales y una visión común sobre el valor del esfuerzo, la disciplina y la pasión en el mundo del cine.
Un encuentro lleno de simbolismo
Este reencuentro no fue simplemente una ocasión emotiva, sino también una muestra de la evolución personal y profesional que ambos han vivido desde entonces. Boneta, quien apenas iniciaba su carrera internacional en aquellos años, hoy se posiciona como uno de los actores mexicanos más destacados a nivel global, con éxitos como Luis Miguel, la serie, At Midnight y proyectos desarrollados por su propia productora.
Cruise, fiel a su legado como figura emblemática del cine mundial, continúa destacándose no sólo por su trabajo frente a las cámaras, sino también por su apoyo a nuevas generaciones de actores.
“Volver a ver a Tom después de tanto tiempo fue como cerrar una etapa y comenzar otra nueva. Me hizo recordar por qué elegí esta carrera”, confesó Boneta.